lunes, 17 de septiembre de 2007

EL ORIGEN DEL POPOL VUH


Por: Harry Thomas Danvers

Tantas veces me han preguntando esto, tantos extranjeros como la gente de aquí, que me atrevo a tratar de explicarlo de una forma (aunque no sea exacta, debido que la historia mesoamericana, todavía está en la sombra) quizás adecuada y aceptable.
En primer lugar, el Popol Vuh está calificado como una fuente original, sobresaliente, de la historia precolombina, fijando en el territorio que embarca el denominado mezo América. Este incluye la tierra conocida como México hoy y todo el territorio de América Central.
Muy bien ¿Pero existen otros manuscritos, paralelos que se pueden tratar de la misma manera? La respuesta es sí, pero son limitados. No estoy hablando de los tres códices que se encuentran en Madrid, París y Dresden. No estoy hablando de ellos, porque en realidad, no hay mucho que aprender. Esencialmente, fueron los últimos testigos de la historia precolombina, que sobrevivieron el holocausto del Obispo Landau, mandado desde España, para erradicar el brujerismo de las civilizaciones primitivas que estaban conquistando en Mezo América.
He visto estos manuscritos y tengo una reproducción del Dresdenciano, obsequiado de una compañía farmacéutica Alemana. Pero estos manuscritos no nos dan, lo que queremos saber acerca de la historia precolombina.
Entonces pasamos a los manuscritos de Totonicapán. Son dos: El manuscrito de Totonicapán y los Señores de Totonicapán. En el primero se relata la historia de éste pueblo, que antes de la conquista española, se extendía hasta Oaxaca, incluyendo todo el territorio del Estado de Chiapas. Los Señores de Totonicapán, para mí, tiene menos valor y es una explicación del segundo rango, con respecto al Popol Vuh.
Sin embargo, estoy enterado que existe otro manuscrito, bien guardado por la cofradía de Totonicapán, que obviamente me gustaría revisar. Está guardado en una bóveda y se llama: Titulo General de Totonicapán. Anteriormente este lugar se llamaba Otzoya y ahora está conocido como "Sobre el Agua Caliente" o Chu´i mik´ iná.
Muy bien, pero tenemos que regresar al tema del origen del Popol Vuh y vamos a enfocarnos en la casa de Cavek, el centro del arte en el reino Quiché. Es muy posible que este manuscrito, el Popol Vuh, fue relatado oralmente, a través de las generaciones y al fin, le tocó la casa de Cavek de seguir con la traducción. Aunque estamos hablando del tiempo post-clásico, es interesante fijar de que personajes sobresalientes de esta obra, se encuentran tallada en estelas en sitios arqueológicos del tiempo clásico, en el Petén. Ahora entra la pregunta: ¿Es posible que el Popol Vuh no es solo una historia post-clásica, sino que llega hasta el tiempo clásico y quizás antes de él? Es muy posible. Sin embargo voy a seguir con el hilo, que se llama Batz en Quiché y en el año nuevo Maya Waxlakib Batz, se trata de unir los siete hilos en uno, para pedir un buen año. En este sentido voy a tratar a seguir este hilo para encontrar el origen del Popol Vuh.
Vamos a regresar al tiempo post-clásico y el Reino Quiché. Su centro del arte era la casa de Cavek (donde ahora se encuentra Totonicapán) como fue mencionado, es muy posible que ellos fueran los encargados de guardar este manuscrito. Es decir, guardado oralmente, entre padre e hijo, con los abuelos, hasta que llegó la conquista española.
Ahora entra un sacerdote español, llamado Fray Francisco Ximénez. Primero estuvo en México, donde parece que fue testigo de la conquista española allí. Fue enviado al territorio guatemalteco, para seguir con la conquista y en términos españoles fue simplemente: "La Espada o la Cruz".
Llegó a Chichicastenango y aprendió el idioma Quiché. Puede ser que también aprendió de cerca las costumbres y la sabiduría de ésta cultura antigua odiada por los españoles. Si fue así y tomando en cuenta que todos somos seres humanos que Jiménez se quedó más callado en vez de forzar tanto la nueva religión, y en esta manera ganó la confianza de esta gente. Pasó unos veinte años en esta manera, hasta que un viejo natural, quizás el último hombre de la casa de Cavek, tenía suficiente confianza en pedirle el favor de escribir en sus letras españolas, el manuscrito del Popol Vuh.
Estamos hablando de una situación bien delicada, tanto para el señor de la Casa de Cavek, como para el sacerdote español. Si se tiene imaginación, se puede ver dos culturas opuestas, tratando de llegara a un acuerdo. El Natural tenía que tener mucha confianza en el español para no perder la historia de su raza. Sin embargo fue un delito con el castigo de la muerte para uno o los dos, si esta inteligencia fue conocida en España ¡Que miedo! Pero vamos a seguir con el hilo en el siguiente artículo.

0 comentarios: