sábado, 24 de julio de 2021

 

HARRY’S CORNER

 

 

El problema existencial del cambio climático

Harry Thomas Danvers *

 

       Estas fueron las palabras del Presidente Biden en explicar una de las prioridades de su administración, pero, yo me pregunto: ¿Qué significa eso?

       En primer lugar, el adjetivo existencial, viene de la filosofía Nihilista, que surgió después de la Segunda Guerra Mundial. Se dice que empezó en Francia con Jean Paul Sarte. Su contenido corresponde al tiempo de sufrimiento colectivo de los sobrevivientes y es una muestra de la inhumanidad del hombre al hombre. Así surgió la idea que el universo no tiene propósito y que el hombre tiene que luchar contra un ambiente hostil. Tomando en cuenta la situación europea en esa época, es comprensible comprender por qué fue propagada tal psicología.

       Sin embargo, al referirse a una cosa primordial como el cambio climático ¿merece tal grado de pesimismo?

       El Presidente Biden es solo una parte de una cadena de esfuerzos mundiales para controlar el cambio climático. Las décadas de reuniones, compromisos, reglas acordadas y metas establecidas, reflejan lo superficial de todo eso con respecto a la realidad del asunto.

       En el momento que escribo esto, hay inundaciones imperceptibles en el centro y las dos extremidades del planeta. En el continente de América del Norte, las temperaturas en el lado occidental, han pasado los más altos recordados en el tiempo moderno. Esto ha causado incendios forestales que han quemado cientos de miles de hectáreas de tierra, causando tornados de fuego. Pareciera como un ensayo de una guerra nuclear. En el otro lado del mundo, el área de tundra de Siberia se está poniendo árida, causando grandes incendios incontrolables.

       Los científicos están preocupados con el clima extremo, porque está cambiando más rápido de lo esperado. ¿Y qué están esperando?

       Las tres fuerzas económicas sobre el planeta, son los                     países industrializados: Los Estados Unidos, China y Rusia. El primer país es democrático y los otros totalitarios. Sin embargo, cometen los mismos errores en sus emisiones de humos tóxicos. Ningún país quiere retroceder ni un centímetro, en su obsesión de la ganancia. Es una Torre de Babel, motivada por el auto-destructivo elemento de la riqueza innecesaria.

       El poder económico va junto con el poder militar. Tiene que proteger lo que es y no es de uno.

         Esta clase de psicología indica que una resolución concreta del problema del cambio climático, es más que nada, imposible. Tal vez a eso quería referirse el Presidente Biden cuando dijo que el problema del cambio climático era existencial.

 

      

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*El tema, contenido y enfoque corresponden exclusivamente a su autor.

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